(A. Montero, en Studium). Manuel María Bru es un sacerdote sobradamente conocido en el ámbito de la enseñanza en Universidades eclesiásticas y en el campo de la Catequesis y el periodismo. Y si tenemos en cuenta que acompañó al papa Juan Pablo II en muchos de los viajes que este Papa realizó al mundo entero, comprenderemos que estaba capacitado como pocos para escribir este libro, que se podría resumir diciendo que es una inmensa crónica de sus viajes.
Uno de los capítulos de este libro se titula así: Huracán Wojtyla. Este huracán comienza cuando comienza a visitar países, sobre todo en los primeros 15 años. Uno se sorprende de una actividad tan desbordante y de leer al mismo tiempo lo que el Cardenal de Barcelona, Monseñor Juan José Omella dice en el prólogo de la vida interior de este Papa:
«Leyendo el libro que tienes en las manos he revivido frases, testimonios, mensajes, actitudes de ese gran Papa que no dejaba indiferente a nadie. Creo que quien haya conocido al Papa Karol Wojtyla, compartirá conmigo que se dieron siempre unas constantes de su personalidad, inseparables de su santidad de vida, que esta biografía trata de subrayar. Una de estas constantes sin duda fue su profunda vida interior, su relación con Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo, en la que encontraba el sentido y la fortaleza de su inagotable entrega personal a su vocación, y que le hacía infatigable en todas sus misiones e invencible en su esperanza, que no conocía freno ni dilación. Una vida interior en la que, además, junto a Dios, siempre había alguien en quien encontraba una protección especial, la Virgen María, madre de Dios y madre de la Iglesia. Era capaz de ensimismarse en esta vida interior en medio de multitudes, manteniendo con ellas al mismo tiempo una misteriosa conexión».
Las crónicas de su actividad, que se fijan más en su actividad pastoral que en los detalles de su vida, te permiten prácticamente saber lo que hizo el Papa Wojtyla cada día y cada hora de su pontificado.
A. Montero
Studium LXI, fasc. 1 (enero-abril de 2021) 173.
Felicitaciones.
Jezu Ufam Tobie.